Tertulia. "La maldad y sus manifestaciones en la vida cotidiana"


Detalles
"¿Es usted un demonio? Soy un hombre. Y, por lo tanto, tengo dentro de mí todos los demonios" (Demócrito de Abdera)
Yo, ante el mal
Puede que creamos ser buenas personas, actuar con ánimo dañino sólo en legítima defensa, de modo reactivo, y no proactivo, tener buenas razones cuando “obro mal”, tendiendo a justificarme con la racionalización. En caso de haber cometido alguna maldad, es muy liviana, no es para ponerse así, …En la lucha por la vida, los malos son los otros.
Tanta bondad puede quedar en entredicho según el listón que pongamos a lo que podamos considerar malicioso. Pudiéramos descubrir nuestros puntos ciegos morales.
Un enfoque práctico del mal
El enfoque del tema a debatir no sería tanto el mal, ni la maldad, sino cómo identificar el mal, sus formas, sus manifestaciones, y sus motivaciones o causas, el mal en sentido operativo: cómo se desenvuelve a diario en primera persona y a nuestro alrededor.
¿Es el mal inherente a la naturaleza humana?
Hablaremos del egoísmo innato, la maldad como un desequilibrio en la tendencia instintiva a sobrevivir. Sí, corremos para coger sitio y nos colamos.
No confíes en nadie, no esperes nada de nadie y no supliques a nadie (Michael Corleone).
Y sí, los ayudadores altruistas que nos podamos encontrar, también esperan obtener algo a cambio, y por eso tememos recibir. ¿O no?
Multicausalidad de la maldad
Podremos debatir sobre la concatenación de causas. ¿La maldad requiere de la libertad como premisa? Las enfermedades del alma (psicópatas, sociópatas, narcisistas, etc), la naturaleza humana egoísta, el carácter, la ignorancia, los impulsos de las emociones, del instinto, el contagio social del mal, se alzan como posibles factores inhibidores de la libertad plena, premisa para concebir el mal como acto voluntario.
Como causa transversal, encontramos las sombras interiores de nuestro ser, que se proyectan fuera, porque no sabemos resolver nuestro malestar interno y lo trasferimos a terceros, cuando no a nosotros mismos.
¿La conducta dañina nace de las sombras de quien obra, de su tristeza interior, sus traumas, sus heridas, que se proyectan en los demás? Comentaremos conductas proyectivas perversas. ¿Somos antes infelices que malvados?
"No lastimes a los demás con lo que te causa dolor a ti mismo" (Buda)
La incidencia de las emociones será otro de nuestros platos, con el cóctel del enfado, el miedo, la envidia, la culpa, la tristeza, el orgullo, …
Los grados de maldad
Pudiéramos graduar la maldad. ¿Toda maldad es un acto deliberado de causar un mal de forma intencionada? ¿Hay formas de maldad tibias, intermedias? ¿podemos distinguir una maldad ciega, una maldad egoísta, una maldad deliberada, una maldad “negligente”? Debatiremos sobre el mal que nace de una “inconsciencia deliberada”. Y también sobre la ignorancia, la buena intención, la obediencia debida, …
Cómo lidiar con la conciencia de la maldad propia
¿Duele más que la ajena? ¿Soporto el sentimiento de culpa? Puede que niegue mi maldad, rehúya culpas, racionalice, ...
O no, y tenga que depurarme con el perdón ajeno, la autoindulgencia, la reparación del mal, la rebaja de mi autopercepción (soy errático).
Las manifestaciones y formas del mal en la vida cotidiana
Los disfraces del mal son infinitos. La diferencia entre el bien y el mal es una línea a veces muy delgada, entremezclados en la vida cotidiana.
Se oculta bajo la apariencia engañosa o ambigua de ciertas acciones, intenciones o personas que aparentan ser benignas o inocentes. Luchamos a diario por averiguar el trasfondo de ciertos actos. Nos adentraremos en el campo resbaladizo de las intenciones del sujeto, de sus motivaciones de fondo, más allá de los actos externos.
¿Los buenos identifican peor el mal?
Mentiras, manipulaciones, traiciones, …el catálogo es infinito. Pero nuestra estrella serán las conductas pasivo-agresivas, la indiferencia omisiva y la neutralidad como forma de maldad, y la maldad proactiva y reactiva.
"El más oscuro rincón del infierno está reservado para los que conservan su neutralidad en tiempos de crisis moral" (Dante Alighieri)
La idea del mal y los referentes éticos
El relativismo y el totalitarismo ideológico conviven en una extraña combinación acerca de la determinación de lo que es “bueno o malo”.
¿Cuál es el referente ético para calibrar las acciones como maliciosas? ¿Hay un mínimo común denominador moral, una brújula moral interna?
La atracción del mal
Podría ser el punto más polémico de nuestro debate…
Lo que refleja de mí el mal sufrido: ¿atraigo el mal?
La indefensión aprendida, la falta de recursos personales, factores inconscientes…¿atraen el mal a mí?
Cómo actuar ante el mal y cómo prevenirlo. Las banderas rojas del comportamiento son señales difíciles de leer.
No seas tan bueno. Egoísmo sano
Se preconiza a menudo. ¿Qué implica?

Tertulia. "La maldad y sus manifestaciones en la vida cotidiana"